¿Serías capaz de programar una aplicación para tu móvil o desarrollar un juego digital? Suena complicado, ¿verdad? Durante las vacaciones de Semana Santa, un grupo de niños de 7 años ha aprendido a cómo hacerlo.
Hacen uso del Scratch. Un lenguaje de programación, ideado en 2007 en el Instituto Tecnológico de Massachussetts, que les permite, de una forma rápida e intuitiva, sumergirse de lleno en el mundo de la informática.
Los pequeños de la casa crean y comparten juegos, animaciones e historietas interactivas. Una plataforma que les ayuda a desarrollar su creatividad y su imaginación además, de desarrollar habilidades de resolución de problemas, lógica y razonamiento.
Un tipo de conocimiento que, sin duda, ayudará a estos futuros profesionales a abordar los retos del mercado laboral en la era tecnológica.