Blanca Calvo, alma mater del Maratón de los Cuentos, sigue igual de ilusionada que el primer año, y eso que están a punto de cumplirse los tres decenios ya. Reconoce que la noticia de los problemas estructurales del Palacio del Infantado lespillaronm a contrapie, con todo muy adelantado y organizado. Incluso disfrutaban penando en el regreso al Patio de los Leones, donde no estuvieron en la edición de 2017, pero al final no puede ser, y lo compensarán poniendo más ganas, más ilusión, más actuaciones de calle y con una pantalla gigante en el patio de recreo del Liceo Caracense, lo que ofrecerá la posibilidad de compensar la diferencia de aforo. Reconoce que como el Infantado ningún escenario, pero que si se hace un museo como Dios manda, en todo el edificio, estaría dispuesta a esperar tres años para poder "recuperar" el patio para el Maratón. Afirma que la edición de este año será similar en muchos aspectos a otras precedentes, aunquetambién hay nocedades destacadas. Confía en que se repita el éxito de otros años, porque se ha puesto tanto trabajo e ilusión como otros años. En dos semanas más o menos seremos testigos de todo lo que está ocurriendo, aunque las inscripcione spara participar van muy bien.