La calle Wenceslao Argumosa se encuentra entre las calles Virgen del Amparo y Virgen de la Soledad. Es una calle llena de viviendas y pequeños comercios que animan y dan vida a esta zona de Guadalajara.
¿Sabes quién fue Wenceslao Argumosa?
Wenceslao Argumosa y Bourke nació en Guadalajara en 1761 siendo bautizado en la desaparecida iglesia de San Esteban. De buena familia con lazos irlandeses perdió a sus padres con 15 años. Pasó su infancia en Guadalajara, estudiando en el antiguo colegio de los jesuitas. Tras la pérdida de sus padres, el arzobispo de Toledo, Lorenzana, se hizo cargo de él gracias a la amistad que tenía con su padre. Esto permitió que pudiera acabar de estudiar filosofía en Madrid y jurisprudencia en Toledo. Consiguió una beca en Italia en el colegio de San Clemente de Bolonia donde acabó siendo decano y catedrático de Cánones.
A su regreso a España empezó a trabajar como abogado en Madrid, siendo requerido para defender a las mejores familias. Se caracterizó en su profesión por su elocuencia y valentía, defendiendo a ultranza las causas que él consideraba justas.
Con la Guerra de Independencia recibió ofertas desde el gobierno de José Bonaparte para incluirle en la dirección francesa del país. Él se negó a diferencia de lo que hicieron muchos intelectuales españoles. Como consecuencia estuvo encarcelado en Francia durante 6 años.
A lo largo de su vida también se dedicó a escribir, y entre sus obras destaca “Los cinco días célebres de Madrid”, donde narra algunos de los hechos más importantes que se produjeron en esta guerra. Demostrado ya todo su patriotismo, también promovió con parte de su dinero la construcción del monumento a los héroes del Dos de mayo que se encuentra en Madrid. Allí murió en 1831, siendo ya con la expansión de la ciudad hacia esta zona cuando Guadalajara le homenajeó con el nombre de esta calle.